Hubiera preferido que estas
líneas no sean el reflejo de momentos de mi vida, pero desgraciadamente, visto
el tema y la naturaleza de mi trayectoria no puedo dejar de exponer lo que
sigue a continuación, lo cual, de todos modos, es cierto y verificable.
Durante dos años seguí en la
antigua República Federal de Alemana (RFA) un curso sobre el manejo de grandes
ejércitos así como estudié posgrados de Didáctica y Administración. Este periodo
de formación educacional reveló ser fabuloso para mí y mi familia, pero ¿para
el Perú, las Fuerza Armadas o el Ejército? Infortunadamente, me resulta difícil
contestar de manera positiva a esta pregunta. En efecto, cuando regresé con
calificaciones realmente brillantes, fui arrumado en una oficina con cuatro
Comandantes más, todos ellos muy buenos y dotados de una larga experiencia en
el ejército. Pero, por diversas circunstancias, todos nosotros éramos no
recomendables.
En mi caso concreto, había
mandado al diablo a un general antiguo que viajó hasta Santa Rosa de Juli, en
Puno para “invitarme” a firmar avances de obra (falsos por supuesto). Mi firma
hubiera permitido tramitar el pago a una constructora a cambio de lo cual el
general habría recibido su parte. Es evidente que si no menciono el nombre de
este personaje bruto e inescrupuloso es porque no quiero sufrir represalias
bajo forma de un juicio por difamación. Pese a que este hecho no fue filmado ni
grabado por mí porque no suelo recurrir a estas prácticas, muchos reconocerán
al protagonista de esta historia y se recordarán de lo ocurrido, así que no
creo que A…z de M se ponga bravo.
Escribo esto únicamente para
resaltar las prácticas que caracterizan a nuestras fuerzas castrenses (y no
solo a ellas sino a todo el país) en cuanto a la manera cómo se desperdician
los conocimientos frescos a los que ciertos profesionales tienen la oportunidad
de acceder, muchas veces en el extranjero. De hecho, esta ventaja en materia de
educación podría contribuir a mejorar
muchos aspectos de las fuerzas armadas. Sin embargo, ocurre que este aporte de
orden cognitivo es destinado a ser relegado a la mazmorra de la historia, pues resulta
desaprovechado a causa de la actuación de personajes despechados y proclives al
robo que, debido a su idiosincrasia, optan por vengarse de aquellos que no
siguen su lógica.
Líos sucesivos con otros
ladrones impidieron que difundiera el conocimiento adquirido ya que se me
consideraba peligroso para el ideal de oficial servil que deseaban muchos
generales. Es más, hace un par de años fui invitado formalmente a dar una
charla de Geopolítica en la Escuela de Guerra, pero a las dos horas de una
entrevista en televisión me llamó el director, quien, con una voz quebrada por
el temor, me dijo: “mi General, disculpe,
pero justo el día de su charla han ordenado que vayamos a correr”. Luego un
amigo me indicó que la causa de la cancelación de mi entrevista tenía por
origen el planteamiento que había hecho en la televisión, en el que señalé que
Villafuerte era anodino, lo que efectivamente es.
Parafraseando parcialmente al
Mariscal Foch, se podría decir que “la
guerra es un asunto demasiado serio para ser dejado en manos de extranjeros”,
y dentro de este marco de razonamiento, el tema de la educación de nuestro
ejército es un asunto que necesita una profunda reforma. Recordamos que el
General Gonzalo Briceño fue quien formó al cuerpo de Comandos del Perú,
guerreros que han demostrado su valor y valía en mil combates. Me quedé por lo
tanto sumamente sorprendido cuando, hace algunos años, pasé por el campo de
entrenamiento de ellos y asistí a una escena muy extraña: algunos extranjeros
los hacían correr como si fuesen reclutas. Pregunté qué pasaba y me dijeron que
“haber traído a los israelitas para
“formarnos” es una burla pues no
enseñan nada. Nos hacen hacer educación física, disparar y dicen que nos están
entrenando”.
El señalamiento hecho por
los miembros del cuerpo del Comando del Perú fue corroborado luego por la
prensa, ya que se puede leer en la página de Internet del diario Perú 21(1)
que; “la Fiscalía iniciará una
investigación por contrato de FFAA y empresa israelí (…) “ y que “el fiscal agregó que la posibilidad de
incluir a los exministros de Defensa Rafael Rey o Hernán Garrido Lecca será
evaluada”. Ese contrato, que según el diario la República se eleva a cuarenta
millones de soles(2)) es un escándalo, puesto que nadie solicitó ese
servicio(3) y “la contratación
de una empresa israelí partió de una iniciativa personal del entonces jefe del
Comando Conjunto, el general del Ejército Francisco Contreras Rivas”(4).
Además, como lo menciona el portal de internet de Americanoticias.pe, “Tubino, quien fungía como jefe de
Inspectoría General del Ministerio de Defensa, (…) defendió el contrato que
suscribió el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas (CCFFAA) con la empresa
israelí (…)”(5). En lo que atañe al comando del ejército,
callaba.
En
vista de lo anterior, y en virtud de mi experiencia pasada en el ejército, puedo
afirmar:
- Primero: que nuestras
Fuerzas Especiales tienen la capacidad de brindar un entrenamiento adecuado a
nuestras tropas sin tener que recurrir a una ayuda exterior e incluso podrían
ofrecer instrucción y entrenamiento a otros ejércitos, tanto por su formación
como por su experiencia en combate. Para lograr lo anterior, sólo se debe colocar
a los oficiales en el puesto que les corresponde, dotarles del equipo que
necesitan y devolverles, tanto a ellos como a toda la oficialidad, el orgullo, el
sentimiento del honor, coraje, honradez, honestidad y fomentar su participación
en la toma de decisiones. Dentro de este contexto, es menester incitar a sus Mandos
a que conduzcan los procesos de ascenso con justicia y a que eleven los sueldos
de Soldado a Comandante.
- Segundo: a la defensa
nacional debe incumbir el deber de brindarnos la seguridad externa que anhelamos, pero ello sólo
será efectivo si logramos la cohesión, impulsando en toda la ciudadanía el
sentimiento de identidad nacional.
- Tercero: si todo lo que
aparece en las investigaciones realizadas en paralelo por IDL reporteros y el
diario La República es cierto, deberían ir a la cárcel muchos de los
mencionados. Es un tema judicial pero, en un país donde hay justicia, son
condenados los que han incurrido en delito.
- Cuarto: la realidad ha
demostrado que es necesario que los ministros conozcan su sector. Un ministro
de defensa debe saber de defensa.
Uno de los objetivos que me
motivó a poner al descubierto lo antes expuesto es el fuerte deseo de llevar al
conocimiento de los no militares que no todos los miembros de las fuerzas
armadas somos ladrones ni arrodillados, y de hacer que mis compañeros de armas
reflexionen y no hagan falso espíritu de cuerpo con una tanda de miserables por
culpa de los cuales somos muchas veces vistos por la sociedad como si todos
fuéramos delincuentes y no los defensores de la Patria, lo que en realidad
muchos de nosotros hemos sido, otros son, y siempre debemos ser.
Tema de reflexión.
Notas:
(1) Ver Fiscalía iniciará investigación por contrato
de FFAA y empresa israelí en
http://peru21.pe/politica/fiscalia-iniciara-investigacion-contrato-ffaa-y-empresa-israeli-2118633
(2) Ver Hernán Garrido Lecca sí acudió al Ministerio
de Defensa con empresario israelí, en La
República.pe en http://www.larepublica.pe/25-02-2013/hernan-garrido-lecca-si-acudio-al-ministerio-de-defensa-con-empresario-israeli. Ver igualmente
Contraloría detecta corrupción en la contratación de instructores israelíes
para comandos del Vraem en
http://www.adonde.com/noticias-peru/web-noticia-la-republica-133012
(3) Ver FFAA nunca
pidieron asesoría extranjera, pero general contrató a empresa israelí en
http://www.larepublica.pe/09-03-2014/ffaa-nunca-pidieron-asesoria-extranjera-pero-general-contrato-a-empresa-israeli
(4) Ibid.
(5) Ver Carlos
Tubino sobre contrato del CCFFAA: "Vinieron oficiales israelíes en retiro"
en
http://www.americatv.com.pe/portal/noticias/actualidad/carlos-tubino-sobre-contrato-del-ccffaa-vinieron-oficiales-israel-es-en-retiro-2013
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